Vocalía Ejercicio Físico

Nuestro objetivo es difundir el poder que tiene la práctica de actividad física regular en las mujeres para mejorar nuestra calidad de vida y su papel principal como herramienta para la prevención ante posibles enfermedades como osteoporosis, anorexia o diabetes gestacional, entre otras.  Te aconsejamos que accedas a nuestro Itinerario saludable para que puedas adentrarte más en todos estos aspectos y los pongas en práctica en tu vida.

RETOS

Descubre cuál es tu reto, hazte una foto realizándolo y compártelo en tu red social favorita bajo el hashtag #lasmujeresnosmovemos. Tu ejemplo servirá de inspiración a otras mujeres que todavía se lo están pensando ¡Estamos contigo!

CONSULTA A UN PROFESIONAL

Si tienes alguna enfermedad conocida, síntomas o signos de enfermedad o quieres realizar actividad vigorosa, deberías  consultar primero con tu médico.

CUMPLE RECOMENDACIONES

En personas adultas la OMS recomienda alcanzar los 150 minutos de actividad física moderada o 75 de actividad vigorosa, principalmente de orientación aeróbica pero también la necesidad de realizar al menos 2 días por semana ejercicios de fortalecimiento muscular.

AJUSTA LA INTENSIDAD

La intensidad a la que debes continuar o comenzar a realizar tu práctica físico-deportiva dependerá de si estabas realizando ejercicio físico regular o no. Sigue las recomendaciones de tu educador/a físico deportivo/a y de tu médico.

AJUSTA EL VOLUMEN

Debes ir progresando poco a poco para dar tiempo a tu cuerpo a que se adapte. Es importante especialmente durante las primeras semanas ser prudente en el volumen de trabajo para reducir el riesgo de lesiones.

AJUSTA EL EJERCICIO

Si previamente no has estado realizando ejercicio físico con regularidad. Puedes comenzar caminando o montando en bicicleta a ritmo suave, aumentando progresivamente la velocidad y frecuencia.

EVITA EL SEDENTARISMO

No solo es imprescindible hacer ejercicio, debemos evitar largos periodos de sedentarismo y de tiempo de pantalla en casa.  Controla tu postura cuando estés sentada.

 

HAZ PAUSAS ACTIVAS

Ponte una alarma y así no se te olvidará “romper” con el sedentarismo. Puedes aprovechar para hacer desplazamientos, realizar algún ejercicio, etc.

CONOCE TUS LIMITACIONES

Antes de comenzar o retomar la práctica físico-deportiva debes conocer tus limitaciones y estado de salud, y ser consciente de que quizás algunos tipos de esfuerzo no sean adecuados para ti.

PERSONALIZA TU ENTRENAMIENTO

Las lesiones previas, el peso, los periodos de inactividad o los ejercicios realizados con una técnica deficiente son algunos de los factores de riesgo que predisponen a las lesiones .Un/a educador/a físico deportivo/a puede ayudarte a adaptar y personalizar tu programa de entrenamiento.

CALIENTA Y ESTIRA

Realiza un adecuado calentamiento, con el fin de adaptar tu cuerpo a la sesión y reducir el riesgo de lesiones. Cuando hayas finalizado el entrenamiento no te olvides de los ejercicios para bajar la intensidad y volver a la calma.